martes, 26 de agosto de 2014

2014

A una semana de mi excursión, a medio mes de mi cumpleaños, a cuatro meses de graduarme me doy cuenta de lo feliz que ha sido mi vida, mi ignorante e innocente vida. Inocente?. Me pongo a reflexionar, pues ya es hora de hacerlo, falta poco. para qué? Seguir estudiando, seguir mi vida, crecer, trabajar. No. Falta poco para terminar esta etapa que tanto me hecho feliz que tanto me hecho reir y disfrutar que ya esta apunto de terminar, como no sufrir esta nostalgia de saber que voy a dejar de ver a mi familia todos los días, de capar, de rumbear los fines de semana, de besarme con tipos desconocidos y reirme con mis amigas después, de la locuras, de ser Once, La Marash.
Como no voy a llorar, pues no es para menos, cambiar los habitos y los amigos, quien dijo que era fácil? No señor, no es nada facil. Estar entre la espada y la pared sin saber que carrera elegir, con todos atrás presiando mas el filo contra la espalda cuando tú todavia quieres seguir jugando, y no estas seguro de nada. Que debo hacer? seguir mis ambiciones? Mis pasiones? Mis amores? Entrar al estudio que me gusta pero en el que no anhelo trabajar o deberia entrar en el que anhelo trabajar pero que no me gustaria estudiar?  a lo mejor no deberia pensar en nada y dejar que las cosas pasaran. Dejar de tener miedo a perder plata y tiempo, a trabajar. A lo mejor es muy temprano y solo necesito esperar que esto termine. Disfrutar el final y esperar el comienzo.